Nuestro país se ha visto expuesto a profundas transformaciones, las cuales han provocado dos fenómenos centrales que debemos considerar: una nueva “verdad social” que influye, convoca, une y moviliza a la ciudadanía; y un activismo que resulta transversal a cada persona en su rol como trabajador, consumidor y votante.

Este contexto requiere de líderes empresariales que sean capaces de escuchar, dialogar, empatizar y conectar desde la emoción; con las personas en el centro y un propósito social que les aporte con impactos positivos en el entorno y medioambiente. Es así, como ya no basta con simplemente focalizar el modelo de negocio en maximizar las utilidades en el menor costo y tiempo posible; debemos generar un triple impacto de manera alineada a estas nuevas expectativas.

Logrando esto, es como podremos recuperar la confianza y formar vínculos fuertes con la ciudadanía;

a través de la gestión inteligente de la reputación, un intangible que hoy se ha vuelto clave para garantizar la sostenibilidad de las empresas al contar con la validación de las bases sociales. Y que incluso influye en la decisión de compra de un producto o servicio.

Es clave comprender la reputación desde los asuntos relevantes de los grupos de interés, como el resultado de lo que comunicamos, la experiencia directa y lo que opinan terceras personas respecto de nosotros. Siendo clave la escucha activa – big data – para poder cumplir con las expectativas de los stakeholders.

Las empresas y sus liderazgos deben ser reputados o simplemente dejarán de ser líderes, al no contar con la licencia social para operar.

Los invitamos a ser parte de nuestro blog de INC Consultores, un espacio que tiene como principal objetivo reflexionar sobre estos desafíos y promover las buenas prácticas reputacionales, y contribuir a la sostenibilidad de cada organización. Súmate y sé parte del cambio.